"Feliz" Cumpleaños.

Hoy cumplo 18 años. En realidad hoy es 1 de Mayo, pero como he estado toda esta semana estresada con exámenes y trabajos, publico y pongo este escrito el día 24. De hecho, el día 24 fue el día más estresante de la semana. Entre eso y otras circunstancias no he podido publicar antes.
Todo ocurrió el 23 de Abril de 1994 a las  siete de la mañana. Mi madre sintió los golpes que estaba dando por conocer el exterior.
Hospital la Paz, Madrid: Mi madre no dilata. Le salen heridas en la boca de tanto aguantarse las ganas de gritar de dolor. y dieciocho horas después de tanto intentarlo, deciden que nazca por cesárea.
Mi padre se pone de mal humor y amenaza a las comadronas diciendo que como le pase algo a la niña, os enteráis.
Y la verdad es que lo entiendo. Tanto aguantar ese insoportable dolor del parto, para que al final te digan, después de casi un día, que al final es por cesárea. . Normal que mi padre les mandara a la mierda. Y mi madre pues porque no tuvo fuerzas, si no otro gallo cantaría...
Por eso, debería de haber nacido el día 23. Si no fuera por las comadronas estúpidas, hubiera nacido el día 23. El día en que mi primo Enrique cumplía un año. Pero no.
Caprichos del destino, y la mala leche de las comadronas, con 49 centímetros y 3 kilos justos, nació en Madrid,  Estíbaliz García Huete...
Algunas veces pienso, que fue el peor día de mi vida. Todavía no se que hago aquí. Se que hay algo que me ata para seguir adelante, pero no se el qué.
Bueno, en realidad si que lo sé, pero hay veces que me cuesta reconocerlo: El amor.

Con dieciocho años he entendido muchas cosas y todavía me quedan por aprender otras. Y posiblemente hay algunas cosas que aunque me las expliquen miles de veces, seguiré sin entenderlas.

Me considero una chica madura. He vivido lo más espantoso que puedas imaginar. He reído hasta llorar. He sufrido por amor el triple de lo que algunas denominan "Llorar por amor", LO MÍO ES AUTÉNTICO, JODER. Tengo amigos de los verdaderos, los más fieles. Enemigos, los más asquerosos...

Y el día 23 de Abril, a las 23:59 estaba en el cuarto de mi madre. Dejé de estudiar. El reloj se puso a las 12 de la noche Ya era 24 de Abril. Y tuve ganas de llorar,  porque nada en mi vida estaba saliendo bien.
Pensaba que iba a ser la bomba, pero no. Los deseos se caen frágiles, como castillos de arena... las olas de la desesperación provocaron todo este desastre.
Por eso no debo cometer el error de antes. Volver a construir el castillo de los deseos, sí, pero con más fortaleza y lo más importante, no esperar a que nunca puede caerse. Es mentira. PUEDE CAERSE. Pensaba que el otro castillo no se iba a caer, y mira.



Por eso, ojo al dato: Construye, pero no esperes a que no sea derribado lo construido





PD: La foto colgada en esta entrada NO es mía, pertenece a Antonio Gamito, un amigo y fotógrafo excelente ¡Muchas gracias!